EL PP DE VIGO ACUSA A CABALLERO DE PONER EN JAQUE LA SEGURIDAD DE LOS VIGUESES AL NEGARSE A REFORZAR LA PLANTILLA DEL SERVICIO MUNICIPAL DE BOMBEROS

Tras el cierre del parque de Coruxo por falta de efectivos, los concejales populares ponen el acento en la “negligente” gestión del Gobierno local y su “incompetencia” para cubrir y convocar ofertas de empleo público
Fernando G. Abeijón y Miguel Martín reclaman que se atiendan las demandas de un servicio que es “esencial” para la seguridad de los vigueses y se tomen medidas frente a una situación “insostenible”

El PP de Vigo ha denunciado este jueves la “precaria” situación laboral que desde hace años persigue al servicio de bomberos de Vigo, sin efectivos ni medios suficientes. A través de sus concejales, Fernando G. Abeijón y Miguel Martín, el principal partido de la oposición ha exigido al alcalde, Abel Caballero, reaccionar ante el riesgo que supone para los vigueses este abandono por parte del Gobierno municipal, poniendo en jaque su seguridad.

En este sentido, ambos han coincidido en destacar la “negligente” gestión del Ejecutivo local en una cuestión de “extrema gravedad” como lo es que el pasado lunes hubiera operativos solo 11 de los 20 efectivos que se exigen por turno. Tras reunirse con trabajadores del parque vigués para conocer de primera mano su situación, han exigido que se atiendan las demandas de un servicio que es “esencial” para la seguridad de los vigueses y se tomen medidas frente a una situación “insostenible” de la que responsabilizan directamente al regidor socialista.

“¿A qué espera Caballero para solucionar este problema? y ¿cuáles son los planes que tienen para este verano?”, se ha preguntado Martín, quien ha calificado de “irresponsable” e, incluso, “temerario” mirar para otro lado mientras que la ciudad queda expuesta ante una eventual emergencia.

Además, ha llamado la atención sobre sus “cuestionables” condiciones laborales, “con una plantilla sometida a ingentes cantidades de horas extra, la anulación de días libres y guardias interminables que condicionan la propia salud de los trabajadores”.

Por su parte, G. Abeijón ha criticado la “incompetencia” del Gobierno municipal socialista para convocar ofertas públicas de empleo, con 400 plazas pendientes de cubrir; y ha reflexionado sobre qué habría pasado el lunes, coincidiendo con el cierre del parque de bomberos, de producirse una emergencia. “Creemos que es hora de que Caballero deje de estar de perfil, se ponga de una vez por todas al frente de la situación y comience a trabajar para garantizar la seguridad de los vigueses”, ha dicho.

El edil popular ha exigido convocar de forma urgente las plazas de bomberos que están ofertadas, en clara referencia a las más de 30 vacantes que hay y que siguen sin cubrirse de forma definitiva. Esto demuestra, a juicio de G. Abeijón, “la total dejadez e irresponsabilidad de los concejales, incapaces de gestionar sus propias competencias”.

En esta misma dirección, ambos concejales han llamado la atención sobre una situación que puede llegar a agravarse con la jubilación el próximo año de 12 bomberos del servicio. De manera que, según ha anotado G. Abeijón, “si no se resuelven pronto los procesos de selección para la incorporación de nuevos efectivos, el servicio puede verse seriamente comprometido y, en consecuencia, la seguridad de la ciudad”.

Categoría laboral

Los concejales del PP han querido hacerse eco de otra de las demandas de este colectivo referente a sus condiciones laborales. En este sentido, han recordado que mientras que en otros ayuntamientos, como por ejemplo en A Coruña, los bomberos forman parte del subgrupo C1, en Vigo corresponden alC2, y han criticado la “falta de compromiso y plazos” por parte del Gobierno municipal para revisar su categoría laboral.

En definitiva, ha apuntado G. Abeijón, que el cuerpo de bomberos es otro de los que sufren “el autoritarismo del Gobierno local y su falta de escucha y de compromiso con la mejora de las condiciones laborales de sus empleados públicos”. A este respecto, recordó que ya en 2020 el Ayuntamiento fue condenado por el Tribunal Superior de Justicia de Galicia por establecer unos servicios mínimos abusivos del 100%, vaciando de contendio el derecho de huelga de los bomberos municipales.